También en este momento mi cantidad de escritos disminuyo, o por lo menos son pocos los que he conservado. Seguramente esto se debió al hecho de que ahora tenia una mejor válvula de escape a través de la creación de historietas. De hecho notarán una significativa reducción de mis referencias hacia el sexo, por lo menos en el papel, y una preponderancia del tema de los comics.
Esta época al parecer fue un momento mas estable emocionalmente para mi “yo adolescente”, en este momento ya de 15 años. Solo tenía en la mente una cosa, salir de la maldita secundaria y entrar a la maldita preparatoria. Mi soundtrack de aquella época son canciones de los Backstreetboys, Britney Spears, SClub7, Kabah y demás música desechable, que por aquel entonces intuía de poca calidad, pero a falta de otras opciones me la tuve que tragar como el resto de mi generación.
Recuerdo que una noche antes del examen de admisión a la preparatoria estuve estudiando con el radio encendido, de tal manera que a la mañana siguiente, antes de entrar al examen de admisión, no pude dejar de tararear la canción de “Sube cada vez más”. Recuerdo que incluso en ese momento me parecía vergonzoso.
Para todo mundo resulto muy decepcionante el paso del año 1999 al 2000, todos esperábamos algo mas emocionante, algo que estrujara a la humanidad. Tendríamos que esperar un año, nueve meses, y once días más, para que sucediera algo así. Nuestros modelos a seguir en ese entonces eran “Sabrina la bruja adolescente”, “Buffy la caza vampiros”, y “American Pie”. Cuando recuerdo cosas como esa, me quedo sin argumentos para juzgar a las nuevas generaciones. Aunque por lo menos los Backstreetboys parecían más hombres que Justin Bieber… solo un poco.
11 de mayo del 2000.
Hoy fuimos a la casa de "la churros" para hacer un trabajo de Español. Su casa está bien padre porque tiene mucho espacio, Carla dijo que a ella le gustaría vivir en un departamento con varios amigos, así como en la serie "Friends”. Nunca me había puesto a pensar en la posibilidad de hacer algo así, pero sí estaría padre principalmente porque así no te sientes sólo.
Y es que estando yo sólo, como hijo único, siempre me sentí como que sólo, como que me faltaba tener a alguien de mi edad a mi lado, algo como un hermano pero mejor como un amigo. O sea que si, Carla tiene razón estaría muy fregón vivir en una casa (o departamento) con varios amigos, cuando ya vivamos solos. Sería divertido, por lo menos en la televisión se ve divertido.
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16 de mayo del 2000.
Hace poco estábamos dibujando Idi, el zurdo, Fabián y yo que somos los que dibujamos mejor del salón. En orden de dibujar mejor estamos el zurdo, que es el que peor dibuja de todos, luego estamos Fabián y yo que nos echamos un tiro. Y por último el que dibuja mejor de todo el salón, y a lo mejor de toda la secu, es Idi, mi primo que hasta hace poco supe que era mi primo gracias al profe Chetos, y a una de sus tareas sin sentido.
Pues ahora Idi y yo vamos a clases de cómics en la Casa de la Cultura de Monterrey Nuevo León. Desde hace mucho tiempo Idi y yo habíamos estado buscando dónde ir a clases de verdad, para mejorar nuestros dibujos. Una vez que íbamos caminando por la calle de noche, cosa que no me gusta, pero últimamente he estado saliendo mucho de noche, supongo que es lo normal conforme te vas haciendo adulto, la vida de uno se va complicando y tus días se van alargando.
Hace poco me puse a pensar en eso, un día que fui a la papelería a comprar un rotafolio a las siete de la noche. Me di cuenta de que antes para esa hora mi día ya se había terminado, y ya sólo me ponía a ver la tele y esperar a cenar y bañarme para el siguiente día ir a la escuela. Pero ahora no, ahora a esa hora la mayoría de las veces estoy con amigos, o haciendo tarea. No sé si me va a gustar hacerme adulto, pero es algo que no se puede evitar.
Entonces cómo iba escribiendo, un día íbamos por la calle mi primo y yo, y me dijo que hace mucho su mamá había llamado para preguntar por clases a “Cygnus Cómics y que al final de cuentas no fue a las clases. Pero ahora sí vamos a ir de seguro dentro de unos años vamos a estar sacando nuestro primer cómic, quizás un crossover entre su personaje y el mío, quién sabe. Ni el zurdo, ni Fabián quisieron ir a las clases de la casa de la cultura. Supongo que los que de verdad teníamos las ganas suficientes para dar un paso más allá de dibujar en las libretas en los ratos libres del salón de clases sólo éramos yo y mi primo. Así será.
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23 de Agosto del 2000.
Por fin terminé la secundaria, es raro porque una de las últimas cosas que hicimos fue grabar un cassette con un mensaje, para que todos los del salón lo escuchemos cuando ya seamos grandes y nos acordemos de nuestros compañeros de la Secu. Nos lo grabo el maestro "Chetos” y también hicimos agendas para guardar nuestros números de teléfono de todos, para que también podamos seguirnos llamando por teléfono. Aunque yo no hablo mucho por teléfonos.
Hace poco tuve mi primera exposición de comics, en la casa de la cultura de Nuevo León. Hice un dibujo sobre "piratas" a tamaño doble carta, en cartulina opalina, y con maríaluisa de cartoncillo color negro. A varios de los de ahí les gustó el dibujo que hice, hasta me preguntaron que cuántos estilógrafos me había gastado haciéndolo. No supe qué era eso, porque mi dibujo lo hice con una pluma de fieltro de punto fino.
Hace poquito me dijo un maestro que los estilógrafos eran lo que usaban los entintadores de comics para entintar las páginas de comics. Le voy a pedir a mi papá que me compre un estilógrafo para hacer mis comics, hasta ahora mi primo, el zurdo, Fabián y yo nada más entintábamos con deslizadores o plumas de gel.
Me gusta mucho hacer comics, dicen que últimamente las compañías “Marvel” y “DC” están buscando a dibujantes de México para que trabajen en Estados Unidos. Yo quiero ser uno de esos.
Yo creo que los comics son, como que, la forma en la que una persona hace una película, pero cuando no tiene dinero para hacer una película. O sea es más sencillo y barato hacer un cómic para contar una historia, que juntar dinero, actores, extras y ayudantes para hacer una película y contar la misma historia. O sea que los comics son como las películas pero sin dinero.
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25 agosto 2000.
Hoy jugué mucho Super Nintendo, la Navidad pasada mi papá me iba a comprar un Play Station, pero yo le dije que mejor me comprara un cassette de Mario Paint, que también trae un ratón para el Super. Está chido porque dibujas y luego puedes hacer una animación con lo que dibujas, dicen que es muy parecido a las computadoras.
Poquito antes de salir de la secu el profe de Computación me enseñó cómo se dibuja en una compu de la secu. Está bien difícil dibujar en la computadora, pero lo chido es que todo lo pintas bien rápido. Luego yo le dije al zurdo que si hacer dibujos en esas compus estaba bien difícil, entonces ¿Cómo le harán los que hacen la caricatura “Guerra de bestias" o "Reebot”, que hacen hasta capítulos de media hora en computadora?
Ha de estar bien difícil y de seguro les han de pagar mucho a los señores que hacen todo eso. Es como los que hacen "King of Fighters” o “Metal Slug”.
Creo que quiero que me compren una computadora, porque ahora todas las cosas se van a hacer en la computadora. Me acuerdo que cuando estaba en sexto de primaria cuando ya íbamos a salir, la profe Rosalinda nos dijo que en el colegio iban a comprar computadoras para enseñarles computación a los niños que venían después de nosotros. O sea que me equivoqué de generación, porque no me tocó tener clases de computación.
Donde sí me dieron clases de computación fue en la secundaria, pero casi no nos enseñaban nada, nomás nos dictaban o nos enseñaban la historia de las computadoras.
Es mas, una vez hasta me escogieron para hacer unos dibujos que no entendí sobre la computadora, para que el profe diera la clase en el salón, sin computadoras obvio. De las clases de compu de la secu lo único que aprendí fue que "Leibinitz” tuvo algo que ver con las computadoras.
Por lo pronto la única computadora que tengo es mi “Super Nintendo”, y con él me tengo que conformar. Pero quiero tener una compu.
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01 de Septiembre del 2000.
Te preguntas qué es esto que estás escribiendo. Tal vez te preguntes por qué estás escribiendo estas líneas, cuando de hecho podrías estar viendo televisión, o en el cine. O bien haciendo alguna otra cosa, que la gente común y corriente acostumbra hacer, para no enfrentarse a lo vacía que es su vida, para no enfrentarse a la realidad de sus existencias.
La vida es aburrida, la mayor parte del tiempo, pero las películas y la televisión se encargan de hacerla divertida. Los medios de comunicación resaltan solamente las mejores partes, las partes más emocionantes y más interesantes de las vidas de los personajes que aparecen en ellos. Por eso nos gustan las películas más que la vida.
Lo que me dispongo a hacer en este "diario personal" es recopilar todos esos puntos clave que hacen de una vida, cualquier vida, mi vida en este caso, algo digno de leerse y de tomarse en cuenta. No sé qué cosas voy a escribir en este diario, no sé qué tan constante seré al escribirlo, ni siquiera sé por cuanto tiempo lo haré. Es más, a lo mejor esta podría ser la primera y última página que escribo, aunque lo dudo.
Lo que sí sé es que al final de cuentas tendré algo interesante y digno de contarse, igual de interesante que cualquier otra vida común y corriente de cualquier otra persona del mundo.
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En las vacaciones antes de entrar a la preparatoria estaba leyendo un libro, el único libro que me han comprado mis papás que no es de la escuela (aunque debo aceptar que si lo compraron por motivo de la escuela, pues hace varios meses antes de terminar la “secu” en la clase español el profe “Chetos”, nos encargó que lleváramos un libro, y que ese libro lo íbamos a leer a lo largo de todo el mes. Pero no recuerdo por qué yo no leí el libro que me compraron mis papás y terminé leyendo para la “secu” otro libro que ya ni me acuerdo por dónde conseguí.
La cosa es que hasta hace unas cuantas semanas durante mis vacaciones me puse a leer este libro que me habían comprado (mas bien folleto), es sobre poesías y meditaciones, del autor Anthony de Mello.
Y por estarlo leyendo se me ocurrió la idea de que yo también debería de escribir algo en ese estilo, ya no tanto como un diario personal como lo he estado haciendo, sino de algo más artístico, poético o hasta profundo. Al principio la idea era que quería llamar la atención de mis compañeros de clase, sobre todo de las mujeres, porque todo mundo sabe que las mujeres se sienten atraídas por artistas, escritores, músicos. Y como yo no tengo talento musical, ni tampoco me funcionó el dibujar para llamar su atención, lo siguiente era ser escritor.
Ya desde antes he escrito otras cosas, desde la “secu” tuve un “diario personal”, pero en ese diario solamente escribía las cosas que me pasaban, o que pensaba, o que me imaginaba. Pero ahora quiero escribir, pero escribir de otras cosas, de cosas interesantes e importantes de las que escriben los escritores profesionales. De hecho he pensado mucho en que saliendo de la “prepa” voy a estudiar algo que tenga que ver con ser escritor, todavía no sé qué, pero apenas estoy empezando a estudiar la “prepa”, todavía me quedan dos años para ver qué es lo que voy a estudiar de carrera.
Pero lo que sí quiero es escribir sobre cosas profundas y serias, no de comedia como hasta ahora lo he hecho en la Casa de la Cultura. Pero todavía no sé por dónde empezar o como empezar, se me hace que mejor me voy a ver las caricaturas.
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Y hasta aquí llegan mis escritos de la época de secundaria, por supuesto recuerdo haber escrito aun mas cosas, sin embargo muchas se perdieron con el tiempo, y con las recurrentes depresiones que hacen que destruya todo lo que creo de vez en cuando. Muchas hojas también se perdieron gracias a los años en los que aprendí a usar la tinta china. Numerosos papeles, camisas, pantalones y hasta colchas de cama quedaron inservibles por el maldito tintero que sufría la obsesión de volcarse (aunque en realidad el que sufría era yo).
De hecho el último texto con fecha de primero de septiembre del 2000, con la cual cierro esta transcripción, en realidad pertenece ya a mis escritos de la preparatoria, los cuales también tengo planeado transcribir y publicar… tal vez.
Pero decidí incluir este texto como cierre de este compendio de secundaria porque refleja muy bien el estado anímico y las pretensiones que tenía al momento de abandonar la secundaria. En ese momento deseaba hacer algo, aunque no estaba seguro de cómo iba a lograrlo. Es curioso que actualmente en mi etapa adulta me siento exactamente al revés, es decir, sabiendo como hacer algo, pero sin idea de que hacer con eso en realidad.
En el último texto menciono que, para una tarea de la secundaria, leí un libro en lugar del libro de poesía que me habían regalado mis papas. Ese otro libro fue “El Enigma de Tunguska” de un autor de apellido Las Heras, el cual me lo prestó una vecina y se trataba de un texto conspiranóico sobre una extraña explosión ocurrida en Liberia a principios del siglo pasado.
Durante mi niñez y adolescencia fui muy adepto a este tipo de tonterías como el esoterismo, la ufología, los fantasmas, la brujería, entre otros muchos cuentos. Mas adelante, en el diario que lleve durante la preparatoria, menciono un par de anécdotas (ninguna sobrenatural) que me sucedieron posteriormente, respecto a esta afición.
Por lo pronto, iré a celebrar que he terminado la secundaria.
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